La depresión

Mucho se habla sobre las enfermedades que afectan a la población y las diferentes acciones que toman las entidades dedicadas a la salud para poder combatir las afecciones de las personas a causa de los síntomas que les genera, pero poco se habla sobre las enfermedades que atentan contra nuestro bienestar emocional, esas enfermedades que no duelen a nivel físico sino a nivel emocional, la salud mental es un tema de suma importancia y que debemos hablar abiertamente para evitar consecuencias como el suicidio.

La depresión en adolescentes y jóvenes es algo más común de lo que se cree y existen mitos que debemos romper. Esta enfermedad no permite el desarrollo normal de la vida diaria, interfiere en los estudios, trabajo, afecta gravemente el estado emocional de los que la padecen y en algunos casos es necesario llegar a la medicación para poder mantener bajo control las emociones. Las causas tienen que ver tanto con factores genéticos, psicológicos, sociales, ambientales, etc. 

Este problema de salud mental causa una tristeza constante en aquellos que la padecen, los adolescentes y jóvenes con depresión dejan de interesarse por las cosas que antes les gustaba hacer, se sienten agotados la mayor parte del tiempo, la ira siempre está presente y la frustración por cualquier cosa pequeña que pueda ocurrir, la autoestima es baja y en casos graves se hacen presente los pensamientos de suicidio.

Los padres, familiares o amigos deben estar siempre alertas a cualquier signo que se muestre, no es normal la tristeza constante, que este alejado del grupo social, que no salga o llore por cualquier situación por más pequeña que sea, no es normal que haga chistes sobre que quiere morirse o el abuso de drogas y alcohol, por eso hay que saber reconocer signos de alerta. 

Es importante cuidarnos entre todos para no tener que pasar por la pérdida de algún amigo o familiar, debemos ser empáticos con las personas que nos rodean, porque nunca sabemos quiénes están pasando por un mal momento y necesitan de comprensión o ser escuchados.